Lavar los cabellos moderadamente . . .
Evitar remolinos . . .
Explicar formación de la cutícula del cabello y la posición de sus escamas, “superpuestas como las de un pescado” . . .
Aplicación de los suavizantes en medios y puntas “generalmente” . . .
Valorar la adecuada “Exposición “ de cualquier producto (MENOS RÁPIDAS Y CON MAS AYUDAS) . . .
Efectivos masajes de distribución y ayuda con “CALOR HÚMEDO”, VAPÓRALES, O GORROS BAJO SECADOR . . .
Las lociones epidérmicas, CASPA, GRASA O CAÍDAS, aplicadas meticulosamente, con ISOPO de algodón, presionando sobre cuero cabelludo, y separando meticulosamente las zonas del cabello, en rayas paralelas de grosor adecuado (2,-cms.) máximo, estimulando con cuidadoso y terapéutico masaje . . .
. . . y así podríamos continuar . . . pero son sólo un ejemplo.
Todas nuestras acciones en el salón tienen una explicación, un por qué y ningún producto lo puede sustituir. Debe ser nuestro método de trabajo. Analicémoslo.
